Dedicado a mis amigos proclives al béisbol y a los negocios, en especial a Beto Rodríguez, espero que sea de grata lectura.
El Béisbol es el deporte más estratégico de todos, por ello no es de sorprender que se pueden describir moralejas para el arte de negociar.
1. En dos y uno tienes que intentar el sencillo. No importa si uno es hábil o no, si has agotado tus recursos y nada más te queda un intento, ¡ve por él!, no tendrás otra ocasión. Aun cuando consideres que la contra parte puede tener dos opciones más; eso ya no cuenta, te queda una aunque nada logres.
2. En dos y dos, la cuenta favorece al pícher. La contra parte, si es el cliente tiene ventajas intangibles, aun cuando parezca que se está realizando una transacción equitativa. Mantenga entonces su oferta con suficiente holgura.
3. En tres y dos, todos corren. En la situación límite hay que porfiar el buen resultado, no el malo. Poco importa entonces tener o no a los mejores hombres en las mejores posiciones. Habrá que tener esperanza en que todo saldrá bien
4. Es mejor el ponche que la doble matanza. En ocasiones queremos el remedio y el trapito solo porque parece posible extender la situación, pero es preferible mantener esperanzas cediendo que empecinarse en llevarse todas las ganancias, en tal codicia puede uno quedarse sin opciones.
5. Atacar la bola de frente. Es común que las personas habilidosas obvian pasos de los protocolos establecidos, la mayor de las veces esta audacia implica consecuencias graves por no utilizar todas las precauciones del caso, así es mejor hacer las acciones debidas, en tiempo y forma.
6. Después de atrapar hay que lanzar al cuadro. Las acciones meritorias, que son celebradas, nos pueden distraer del continuo, hacer pausas y divertirse es muy sano, pero debe uno estar fuera del campo, después de una gran maniobra hay que hacer todos los trámites, de otra suerte la jugada no cuenta.
7. En primera no debe uno de barrerse.¡No te limites!, ¡Sigue con todo!*
8. En bateo y corrido, no se mira el resultado del swing. Una vez que estamos de acuerdo con el grupo debe uno actuar sin desconfianza y sin vigilar el desempeño del compañero, dedicarse a supervisar puede ser equivalente a fracasar el intento. La coordinación implica confianza.
9. Si revira a primera, no falle. Existen muchas operaciones de rutina y otras hasta simpáticas que pueden rendirnos beneficios (entrar una rifa, por ejemplo) aun así tenemos que asegurarnos que nuestra acción es lícita y que no erremos en nada, pues el gazapo puede costar el partido.
10. En jugada de selección prefiera lo seguro. En ocasiones tenemos la oportunidad de hacer un negocio con ganancias pingues pero de riesgo y otra de mejor prospección pero discreta en beneficios. Siempre es preferible obsequiar la jugada segura. Optar por los mayores beneficios puede redundar en pérdida de ambas o entrar a una situación muy compleja.
11. Con hombres de posición de anotar, hasta con un elevado se anota. Considerar la ventaja relativa implica aprovecharla en el momento, aun cuando se tengan mermas o costos o se incurra en errores, hacer consideraciones como "no nos toca enviar el producto", o "el costo de un seguro reduce el margen" es perder lo más por lo menos, regale el menos y siga adelante.
12. Turnos de calidad logran resultados. En ocasiones sentimos que estar haciendo la tarea no redunda en beneficios, sin mirar lo que de apoco se va construyendo. Mantenerse lo más posible vigente durante nuestras oportunidades redundará en que encontremos la gran jugada o que nuestros socios consoliden como consecuencia de nuestro trabajo.
13. El noveno en el orden, también puede producir o anotar. Solo hay que entender las habilidades de cada quien, aunque parezcan limitadas siempre pueden ser útiles en un momento*.
14. Tocar la bola es oportuno. La tarea más simple debe ser dominada por todos, en ocasiones las personas con jerarquía se niegan a dominar tareas sencillas, pero no sabemos cuando se requerirá que el famoso o importante realice a beneficio una tarea somera, todos deben dominar lo sencillo, ello redunda en resultados espectaculares.
15. Si te piden la bola, espera al relevo en la loma. Siempre tener detalles de urbanidad, delicadeza o consideración nos ganarán prestigio y reconocimiento. Así que si a nuestro juicio aun teníamos que ofrecer, pero nos piden el espacio, procuremos que el relevo tenga todos los elementos para jugar.
Más una: El equipo es de nueve jugadores: Todos contribuyen con el éxito*
Existen otras muchas enseñanzas que se pueden descubrir en el rey de los deportes.
*Colaboración de Beto Rodríguez, gracias.
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